Spain
Christian Escriba is a fourth-generation pastry chef from the famous family-owned Pastry Boutique,Pasteleria Escriba in Barcelona, founded in 1906, at number 546 on the prestigious Gran Via of Barcelona, part of Barcelona’s prestigious culinary heritage and culture. Son of Antonio Escribá, well-known as the “magician of chocolate”, Christian Escribá has inherited the culinary artistic talents of his ancestors.
Christian Escribá began his apprentice at the young age of sixteen years old where he worked alongside the great master of Pasteleria Mora in Barcelona. The following year, he went to Paris to work alongside his mother’s father; Etienne Tholoniat, a great master renowned for his work with satinized sugar, which is where Christian discovered his passion and talent for working with sugar. Before returning to Barcelona in 1982, he further developed his culinary skills working with prestigious French kitchens, notably Dalloyau, L’Auberge Peraudin, and L’Homar à la Crème.
Over the years, Christian has won several competition titles; he was awarded gold medal at the competition for Young Pastry Chefs held in Deauville, he also won first prize for the best artistic showpiece at the international food trade show, Alimentaria, in Barcelona. In 1980, he was awarded two gold medals at the National Pastry Competitions held in Valencia and Madrid.
Today Christian owns his own pastry shop in the historic Casa Figueras on the Rambla, now the “in” place in downtown Barcelona to enjoy fine desserts and pastries. Christian created the first Pastry Showroom in Europe, where he can share and show his latest creations to his prestigious clientele.
Christian continues to share his time between his pastry boutique and making new creations. His recent Candy-Glam rings sweet creations are so successful that Parisian department stores display them in their jewelry sections.
Christian is often invited to give seminars at the best gastronomic conferences in Spain and abroad like; Madrid Fusión, Dulce Fusión, Andalucía Sabor in Seville, Gastronómika in San Sebastián, Festival Culinario in Fez, Mesa Tendencias in Brasil, Bcn Vanguardia, Mercats of Barcelona and Sweet Llambion de Avilés
Christian Escribà es heredero de una saga pastelera de larga tradición. Aprendió con los grandes maestros de la Pastelería y se desplazó a París a la pastelería de su abuelo materno, Etienne Tholoniat, gran maestro reconocido mundialmente por su trabajo con el azúcar satinado y dónde Christian aprendió una de sus grandes pasiones, el trabajo con el caramelo.
Con sólo 16 años ganó la Medalla de Oro del Concurso de Jóvenes Pasteleros de Deauville y un año más tarde obtuvo la Medalla de Oro y el Primer Premio a la Mejor Pieza Artística en el concurso organizado en la Feria Alimentaria celebrada en Barcelona. Además ha sido galardonado con dos Medallas de Oro en los Concursos Nacionales de Pastelería que se celebraron en Valencia y Madrid. En Octubre del 2008 fue nombrado Mejor Pastelero de España por la Academia Española de Gastronomía y ese mismo año entra a formar parte de la Academie Culinaire de France.
Desde su vuelta a Barcelona, ha dedicado su carrera al negocio familiar, además de impartir cursos y conferencias sobre sus innovadoras técnicas. En 1987, Christian muestra sus obras en el primer Show Room de Pastelería de Europa, lugar en el que lucen las más novedosas creaciones y donde los clientes más indecisos pueden observar réplicas de pasteles.
Ha colaborado con su colega y amigo Ferran Adrià impartiendo cursos de pastelería para profesionales de la restauración. Christian ha seguido innovando y creando y en 2003 presenta unas joyas de caramelo, los Candy Glam Rings. Unas piezas de azúcar que se han llegado a vender en 16 países y 600 puntos de venta.
Debido a su creatividad y arte en la pastelería, se requiere su presencia en los certámenes gastronómicos y conferencias más importantes de proyección nacional e internacional. Es Embajador y colaborador de Chocovic en la tarea de fomentar la creatividad, excelencia y calidad en el arte del chocolate.
Para Christian Escribà, es un placer poder participar en este evento de prestigio internacional que congrega a profesionales del sector del más alto nivel. Debido al vínculo que tiene con París por su trayectoria profesional, desplazarse hasta dicha ciudad, de arraigada tradición con el chocolate, para una competición de tal dimensión le evoca buenos recuerdos y grandes expectativas. Está seguro que los candidatos van a ponerle muy difícil su elección debido al alto nivel que allí se reúne.